En la historia del hombre, se han buscado incesantemente formas para reemplazar los dientes perdidos por diferentes causas, utilizando dientes de muertos, piedras talladas, metales preciosos como el oro y plata, pedazos de madera y fragmentos de conchas, entre otros materiales. Estas técnicas rudimentarias que fueron evolucionando, de acuerdo a sus creencias religiosas, culturales, sociales, biológicas y conocimientos de tiempo, fueron solucionando los problemas estéticos y funcionales. El avance de la odontología con sus restauraciones protésicas, empezaban a cambiar ese rumbo utilizando materiales acrílicos y metálicos, que dieron muy buenos resultados en su momento. Sin embargo, nuevos materiales aparecieron, con más ventajas sobre los anteriores, como la dureza y la estética, considerándose rehabilitaciones más funcionales y de aspecto más natural que los dientes normales. No fue hasta el descubrimiento de Per Ingvar-Branemark hace ya más de 50 años, sobre la oseointegración en donde por primera vez se habla de la unión del metal Titanio, a el hueso de los maxilares, marcando un nuevo curso sobre el reemplazo de un diente perdido e iniciando una nueva era con una nueva tecnología combinada con la biología ósea, el diseño de aditamentos metálicos en forma de tornillo utilizados como implantes para sustituir una raíz y cargar una corona o diente sobre el mismo implante que se adhiere al hueso.
En el 2004 se establecen principios de calidad de los implantes dentales por la FDI (International Dental Federation)
Desde ese momento inicia una revolución que cambiaria el curso convencional de la rehabilitación protésica en pacientes con anodoncia parcial o total. El interés por el desarrollo de implantes fue de tal impacto que inmediatamente muchas empresas voltearon a ver ese mercado y el aumento en su fabricación, así como su interés fue impresionante. En el año 2002 la OMS considera al edentulismo un importante problema de salud publica, y lo declara un tipo de invalidez funcional, al 2003 había en el mundo más de 80 Fabricas de implantes dentales, 220 marcas, 2000 diferentes tipos de implantes dentales de diferentes materiales, formas, diámetros, longitudes y tratamientos de superficies.
Ante tal incremento de fabricación y de marcas en el mercado ya se veían algunas diferencias en su calidad y materiales que se utilizaban. En el 2004 se establecen principios de calidad de los implantes dentales por la FDI (International Dental Federation) recomendando utilizar sistemas de implantes con estudios clínicos que cumplan con normas internacionales como la ISO (International Standarization Organization), que rigen los requisitos y normas nacionales e internacionales del uso de los implantes, de acuerdo a su proceso de fabricación y uso.
Por otro lado los requerimientos y necesidades de cada paciente nos obliga a seleccionar implantes, de forma individual, así como exigir cada vez más a cada uno de los implantes, como sus diseños y respuestas con el organismo biológico, características que van más allá de lo que inicialmente fueron creados como; como cargas inmediatas, o cargas corto plazo, que ayuden a regenerar hueso en su plataforma, que mejoren la estética restaurativa, que eviten estructuras anatómicas importantes como los implantes cortos o angulados, que se integren al hueso de forma más temprana modificando sus cuerdas, superficies y revestimientos etc. Fuera de lo convencional, que se anclen o se integren en otros huesos de la cara como el cigoma, solo algunos ejemplos de lo que hemos vivido en esta evolución de los implantes.
Su implante innovador (FIXO) de característica monofásico, para carga inmediata es por más un implante superior a muchos de la competencia que apenas piensan en esa evolución
Esta cuestión obliga a las empresas que fabrican implantes a implementar nuevos diseños y mejoras en sus sistemas además de hacerlos más versátiles y menos complicados en su aplicación, una tarea que no es nada fácil ya que implica mucha investigación dedicación y verdadera pasión para inventar, modificar y mejorar los prototipos convencionales, buscando nuevos beneficios para su integración estabilidad en el hueso y rehabilitación protésica, con menos complicaciones.
Con tantos implantes en el mercado nos hace difícil seleccionar un sistema adecuado que cumpla con estos requisitos, así como los permisos y controles de calidad, ya que algunas marcas en México se venden sin cumplimiento de normas internacionales.
El sistema de OXY implant es una empresa de origen italiano, ya de entrada un país con una trayectoria en productos de una gran calidad y bien posicionados mundialmente, cumplen con los estándares de control y calidad requeridos por las instancias y autoridades competentes, que nos aseguran un implante seguro de utilizar, además de brindar una gran variedad de implantes en diseños, diámetros y superficies que permiten , una fácil elección de acuerdo a las necesidades que tenga cada nuestros pacientes.
Sus sistemas de inserción quirúrgica y protésica son versátiles y de un control en fresado seguro ya que cuentan con topes y no permiten errores de longitud, también son de tiempos cortos con menos trauma sobre el hueso y mayor retención de sus implantes, gracias a su diseño cónico y cuerdas estratégicas para los diferentes tipos de hueso, la conexión cono morse verdadera, ayuda a que los abutment en su interface brinden beneficios adicionales como mayor estabilidad, menor micro movimiento, y menos contaminación bacteriana, haciendo su rehabilitación protésica más confiable y segura. Su implante innovador (FIXO) de característica monofásico, para carga inmediata es por más un implante superior a muchos de la competencia que apenas piensan en esa evolución, sin lugar a dudas será el preferido por muchos.
Su servicio es serio y puntual, que inspira confianza, subrayando que OXY Implant contribuye y fomenta la educación continua con la investigación, así como su participación altruismo, como empresa que se preocupa por los pacientes y por estar siempre a la vanguardia.
Por otro lado no olvidemos que los avances biotecnológicos, nos obligan a evolucionar en paralelo con los diseños y avances de estos implantes y seguir en líneas de investigación científica acerca de su comportamiento a largo plazo, ya que son dispositivos que seguirán evolucionando y transformándose a través del tiempo.
Dr. Jacobo Rivera Coello
Cirugía Oral y Máxilofacial
Implantología Oral y Maxilofacial
Profesor por oposición en Cirugía Bucal UNAM FO
Hospital Ángeles Metropolitano
Profesor y Adscrito al Servicio y Especialización de Cirugía Oral y Máxilofacial UNAM